El blanqueamiento dental es un tratamiento estético revolucionario que logra reducir varios tonos el color original de las piezas dentales, dejando los dientes más blancos y brillantes, no duele ni es un tratamiento invasivo.
El blanqueamiento dental se puede realizar en clínica (con lámpara de luz fría) o en casa (con férulas), pero siempre bajo la supervisión del doctor para evitar daños en los dientes, siguiendo sus consejos los efectos serán más duraderos.
La duración del blanqueamiento dental será menor en personas que consuman alimentos con alto contenido en pigmentos, como café, té, fumadores, consumo excesivo de cítricos, etc. No obstante se puede dar puntualmente si se requiere una sesión de blanqueamiento a modo de recordatorio pasados 10 o 12 meses.